
Augusto Fernández se fue "dolido" por el presente del club que es su "vida", pero aclaró: "No me fui porque las cosas andan mal". Y reveló los consejos de Ortega.
Y se fue el Negro... Ahora sí. Después de tanto adiós frustrado, de valijas que se desarmaban en el camino a Ezeiza, finalmente Augusto Fernández se subió a ese avión que hace rato lo espera. Y voló, voló. Se hizo larga la despedida. Ya no es el interés del Real Madrid, tampoco en la Lazio donde jugará. Ahora su lugar en el mundo se llama Saint Etienne, equipo del montón en Le Championnat y al cual arribó ayer, a préstamo por un año. "Las cosas se dan y, a veces, uno no puede elegir. Mi pase lo maneja un grupo inversor, que vino con esta oferta y yo la acepté", cuenta el mejor amigo que tenía Ortega en el plantel de River. "El siempre me aconseja y me dijo que la carrera del futbolista es corta y que hay que aprovechar los momentos para hacer una diferencia que pueda ayudar a la familia". Y hablando de eso, Augusto deja muchas cosas, entre ellas, su entrañable e impecable Fitito negro. "Y, quedó en Pergamino. Le pedí a mi papá que lo mantuviera bien, que no lo dejara venir abajo", bromea el volante que jugó su último partido con la Banda en la derrota del domingo contra Banfield: "No querían que jugara pero yo sentí que debía hacerlo, porque River es mi casa, es mi vida. Llegué a los 11 años y ahora tengo 23, así que imaginate; la pensión, las Inferiores... Uf, la verdad, voy a extrañar un montón".
-Pero no te fuiste en el mejor momento...
-Sé lo que es River y si no salís campeón, no sirve. Yo disfruté del título que ganamos, pero los demás años los sufrí mucho. Me duele el presente porque quiero que River esté ahí arriba, pero tampoco tenemos que dramatizar, esto recién empieza y hay un buen grupo que puede lograr los objetivos.
-¿Te molesta que alguno piense que te borrás?
-Siempre me quise quedar porque mi sueño es ganar la Copa Libertadores con River. Pero se presentó una oportunidad que me conviene en lo económico y que quizá no se repita. Yo no me escapé de River, no es que me fui ahora porque las cosas van mal. Ojalá que éste sea un hasta luego y que las puertas queden abiertas porque mi deseo es volver y ganar la Copa. Es una espinita.
-¿Hablaste con Pipo?
-Sí, siempre tuve muy buen diálogo con él y me dijo que sería incapaz de trabarme esta posibilidad.
-¿El grupo está entero?
-Hay material de sobra para sacar esto adelante, sin duda. Están Ariel (Ortega), Marcelo (Gallardo) y el Pelado (Almeyda), que tienen mucha calidad, y puede salir una mezcla interesante de experiencia y juventud. Si saben rodearlos, ellos van a llevar bien el barco y le van a dar muchas alegrías a una hinchada que es la más grande de todas, que nos acompañó a todos lados aunque hayamos salido últimos.
0 comentarios:
Publicar un comentario