Augusto Fernández conseguiría su pasaporte europeo en los próximos días y tiene un pie fuera del Millo. "En diciembre le pedí a mi representante que no me negocie porque quería ser campeón. Ahora si me toca irme, lo voy a hacer tranquilo. Espero volver algún día", aseguró.
Cuando terminó el Apertura pasado, fueron varios los equipos que preguntaron por él. Sin embargo, su deseo de quedarse y el pedido de Simeone a los dirigentes para que intenten retenerlo pudo más. Hoy, la realidad es muy distinta. Augusto Fernández acaba de lograr uno de sus sueños desde que llegó a River: salir campeón. Entonces, entre las ofertas que en las próximas horas acercarán algunos clubes europeos y su intención de partir "para volver algún día", el volante sería uno de los que se irían del flamante ganador del Clausura.
"En diciembre le pedí a mi representante que no me negocie porque quería ser campeón con River. Ahora si me toca irme, lo voy a hacer tranquilo porque ya conseguí un título. Espero volver algún día porque en River viví doce años de mi vida, es mi casa y lo amo", indicó Augusto, a quien Lazio tiene apuntado como prioridad. Enseguida, el volante remarcó, en diálogo con el programa Mitre FC -de Radio Mitre- que el torneo ganado tiene un sabor especial porque "hay muchos chicos de inferiores en el plantel y compartir todo con ellos es muy fuerte, todavía a uno le cuesta caer. Cosas felices y tristezas vivió uno en la pensión para llegar hasta acá. En la pensión hay que apoyarse mutuamente".
Por último, Fernández dedicó el título a los que "alentaron siempre al plantel" y reconoció que los que "tiraron maíz" tras el partido con San Lorenzo provocaron "un dolor muy grande como jugadores e hinchas de River". "Vivimos momentos feos y malos, veníamos de una eliminación de la Copa muy dura y fue muy importante la unión que tuvo el grupo", concluyó.
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